PACO SANCHIDRIÁN

(Con motivo del encargo de la escultura para el Premio a la Libertad de Expresión. 1999).

 

ASÍ FUE

 

  Se me ha ocurrido, a ver que te parece, ya que en nuestro Periódico uno de los principales lemas, el tema principal diría yo, es, sin duda, eso, y pienso que podría estar muy bien, porque hay muchos candidatos, muchas personas que han luchado y siguen luchando por ello, pese a la dificultad que  conlleva, ya sabes, y aunque parezca que ahora es más fácil, pues vivimos en Democracia y una de las premisas de toda democracia es precisamente eso, no lo es tanto; y yo pienso, ahora me dirás lo que piensas tú, que estaría muy bien el premiar a personas e instituciones que se hayan caracterizado precisamente por eso; Así, en principio, sin haberlo pensado todavía demasiado, ya se me ocurren unos cuantos nombres; personajes del mundo de la Cultura, periodistas y tal que encajan perfectamente en lo que te estoy diciendo; ¿ qué te parece?. El premio, que sería de algún modo simbólico, podría consistir en una estatuilla... una escultura que simbolizara eso; ¿me entiendes?; y ahí es donde entras directamente tú, si te parece bien, si te apetece... No sé... ¿qué opinas?.

  Me llamaba por teléfono David Piñero y me estaba proponiendo que fuera yo el encargado de dar forma, forma artística, a un Premio, que se iba a entregar desde el periódico LA VOZ DEL OCCIDENTE, que él dirige, a la LIBERTAD DE EXPRESIÓN. Encantado.

  Era por el mes de Mayo y el acontecimiento tendría lugar en Noviembre. Tengo tiempo de sobra. Me apetece mucho hacerlo.

  Siempre me ha gustado crear. Y sigo haciéndolo. Hago obras –pinturas, esculturas- como para realizar, al menos, un par de exposiciones al año. Me gustaría que fueran más; pero mi labor docente – que también me encanta- me ocupa mucho  tiempo. Además necesito tiempo para estar con mi familia.  Manuel, mi hijo mayor, está en una edad difícil.  A mí, siempre que oigo lo de que “ los 15 años es una edad difícil”, me hace gracia. ¿Difícil para quién?. Será para los padres, profesores y la gente que los rodea; porque dejarse arrastrar por la tontería con la que se vive a esa edad es muy fácil, quizás incluso inevitable. Crecerá. Eso sí, en fútbol muy bien. Alba, la pequeña, tiene 6 años y es un terremoto. Esa sí que está en una edad difícil. Para ella y para los demás. Es muy creativa. También ella me ayuda mucho a crear. Físicamente. Como dice mi amigo Gonzalo Barrena que la conoce bien, en un texto que me escribió para el catálogo de una exposición que hice recientemente  “Una niña con el pelo cayendo sobre la frente, despeinada y rubia, juega con el óleo que alguien dejó descuidadamente a su alrededor. Cuando se cansa, hace saltar la tapa de otra química y la incorpora al fondo sobre el que actúa: una tabla puesta allí por el azar”.  La tabla es algún cuadro a medio acabar que está en el taller.  Siempre quiere ayudar.

  La libertad de expresión. Le doy vueltas y vueltas y no logro ver claro la forma de plasmarlo. Instintivamente pienso en la Estatua de la Libertad, de Bartholdi, en Nueva York (puf). Pienso en Delacroix, en la Paloma de la Paz, de Picasso; en Aristóteles, en Descartes, en Spinoza, en Rousseau,  Kant, Hegel, Marx, Nietzsche, Sartre, en caballos salvajes, en pajaritos de colores...

  Todo individuo tiene derecho a expresar públicamente sus opiniones. Prensa, radio, televisión, son medios idóneos para ello. Un bolígrafo, una pluma, un micrófono... demasiado obvio; demasiado fácil.

  Libertad de expresión. Me parece que debe aparecer una boca; una boca abierta, por supuesto.

  Hago los primeros bocetos: una cara con la boca abierta. No sé, puede parecer cualquier cosa. Apoyo esa boca abierta con unas manos a los lados. Bien, ya parece que está hablando; está hablando fuerte. Parece que tiene algo importante que decir, y las manos ayudan a hacer eco, a que su voz llegue más lejos.

  La idea me gusta pero sobra la mitad de la cabeza; me centro en la boca y las manos. Mucho mejor pero es demasiado realista. Hay que sintetizar: no hacen falta dientes, ni nariz, quito también la barbilla,  pómulos, dedos... Muy bien, ya está la idea plasmada; en dibujo queda muy guapo.

  985........ ¿David? soy Paco. Que ya lo tengo, sólo me falta hacerlo. Se lo cuento. Perfecto. Claro, el galardón no puede ser único ¿no? quiero decir... habrá que hacer muchos... ¿Cuántos premios se van a dar? ¿Uno o dos anuales?. Vale. Tenemos que ir enterándonos de dónde se puede hacer el vaciado para realizar las estatuillas en bronce. De acuerdo. Un abrazo, David.

  Me pongo a trabajar. En principio pienso hacerlo en madera, castaño que se talla muy bien; pero tras estudiarlo detenidamente decido modelarlo en barro. Es mucho más sencillo, y total... la figura original no importa de qué material sea. Porque de la figura original en un taller sacarán todas las que necesitemos en bronce. Bueno, hemos elegido bronce porque queda mejor para una cosa de este tipo, pero de la figura original se podrían hacer otras exactamente iguales en cera, cristal, yeso, oro... cualquier material susceptible de ser fundido. El proceso consiste en hacer un molde hueco (negativo) partiendo del original donde se vierte la materia (en este caso bronce) que ha de ser moldeada para obtener el positivo.

  Bien, ya tengo el barro. La arcilla se trabaja muy bien pues si la vas manteniendo ligeramente húmeda puedes añadir o quitar todo lo que quieras. La forma general se la das con las manos y después con unos utensilios parecidos a los de cocina (cucharas, cuchillos) modelas la forma definitiva. Unas cuantas horas de trabajo y.. ¡ya está!. Me ha quedado muy bien.

  Nos visitan Adelaida y Bernabé (también colaborador del periódico), personas a las que nos une una gran amistad. Les enseño la obra y hablamos largo y tendido sobre la libertad de expresión. “Que todas las personas tuvieran las mismas posibilidades y pudieran disponer de los mismos medios para ser escuchadas, para decir su opinión” eso sería realmente la libertad de expresión, determinamos.  Me comentan que la misma figura repetida varias veces daría una imagen más apropiada de ello. Lo dibujo, hago unos cuantos bocetos  con tres, cuatro bocas de diferentes tamaños con sus manos alrededor. Bueno, lo hago también en arcilla. Quizás la idea quede mejor expresada así pero estéticamente queda peor. Fuen opina lo mismo y en una visita posterior Adelaida (artista, centrada más bien en la Restauración) y Bernabé lo corroboran. A lo mejor es porque así, al agrupar varias figuras a la misma altura, la composición general es horizontal y parece que no queda bien para el fin al que está destinado (galardón). Vuelvo a dibujarlo dejando más espacio arriba, conservando las mismas figuras; quedan demasiado pequeñas en el formato total. Definitivamente decidimos que la primera idea era la buena.

  Tengo que volver a hacerla de nuevo pues al enseñarla, por descuido no la tapé bien, se secó muy rápido y se resquebrajó. Si se deja secar poco a poco manteniéndola tapada con un paño o un periódico para que absorba la humedad no resquebraja. Lo ideal, para se sea más resistente es cocerla en un horno a 1000º C, más o menos. Al realizarla otra vez introduzco ligeros cambios: los antebrazos sobresalen por debajo del contorno rectangular en el que se inscribe la figura y además la hago con dos texturas diferentes, el fondo más rugoso (casi imitando la textura que da la madera al ser tallada) y los labios y manos más lisos.

  Paco, soy David. Que hablando el otro día con el también artista del occidente Manolo Linares le comenté el tema y me dijo que en Pola de Siero hay un taller que se dedica a ello. En él hicieron las esculturas de La Lechera y estas  que hay en Oviedo. He hablado ya con ellos y me han comentado que no hay ningún problema en hacerlo, lo único la cuestión de tiempo pues dependiendo del tipo de escultura que sea y del tamaño es más o menos costoso y pueden llegar a tardar hasta un mes –le comento que esto es un bajorrelieve y es lo que presenta menores dificultades-. David, cuando quieras pasas por aquí; está listo. Bueno pues el domingo voy a Boal a hacer un reportaje sobre la Feria de la Miel y de vuelta aprovechando el viaje lo recojo y el lunes  mismo lo llevo a La Pola. Hasta luego.

  Les enseño la segunda versión, la que hice con varias figuras pero David y su mujer, Rocío, también opinan que este es el bueno.

  Nos informan sobre los galardonados en esta primera edición y nos entregan la invitación para la celebración del 2º Aniversario del periódico, que está muy próxima, donde, además, se entregarán los galardones. Esperemos que gusten.

  Así fue.    

       

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